Los probióticos son usados con frecuencia para prevenir o tratar diversas enfermedades, en especial padecimientos gastrointestinales como las diarreas.
La Organización Mundial de la Salud define a la diarrea como “La presencia de tres o más evacuaciones sueltas o líquidas al día o el incremento en el número de evacuaciones en un período de 24 horas” y suelen tener diferentes causas.
La evidencia científica demuestra que los probióticos pueden disminuir hasta en un 50% la aparición de diarreas, así como reducir su duración debido a que:
- Disminuyen el pH a nivel intestinal, creando un ambiente desfavorable para los microorganismos dañinos, impidiendo su crecimiento.
- Estimulan el sistema inmunológico para combatir las infecciones.
- Compiten contra los microorganismos nocivos.
- Luchan por adherirse a las células intestinales evitando el establecimiento de bacterias perjudiciales.
Los probióticos más utilizados en el combate contra las diarreas son del género Lactobacillus y Bifidobacterias.
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Los probióticos son grandes aliados para el combate contra las diarreas en especial la cepa Lactobacillus casei Shirota, la cual ayuda a prevenir infecciones gastrointestinales al evitar la reproducción de bacterias nocivas y estimular el sistema inmunológico a nivel gastrointestinal.
Haz de los probióticos partes de tu alimentación.
¡Consúmelos diariamente!
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